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miércoles, 27 de enero de 2021

LECCIÓN 20 Simulacro de lectura crítica

La lectura en silencio, conocida también como lectura mental, se refiere a la percepción silenciosa de un texto escrito para entender su contenido. La lectura en silencio contrasta con la lectura en voz alta, que puede realizarse tanto comprendiendo el texto como sin comprenderlo.


El término de lectura en voz alta se refiere al reconocimiento de letras y palabras para pronunciarlas. En este tipo de lectura el aprendiente codifica fonológicamente la información presentada haciendo uso de la competencia ortoépica. En la adquisición de la competencia lectora, la lectura en voz alta simplifica considerablemente la tarea de asociar, como una unidad global, la cadena de letras de una palabra impresa a la forma oral de una palabra. Esta habilidad de relacionar la palabra escrita con su sonido puede ayudar a aprender una pronunciación correcta y además facilita, más adelante, la comprensión lectora.

Con la lectura en silencio, contrariamente a la lectura en voz alta, el lector busca comprender el texto. Básicamente se pueden distinguir tres objetivos por los cuales un lector se acerca a un texto para leerlo silenciosamente: obtener información, experimentar placer y practicar la lengua que está aprendiendo. La lectura realizada para aprender la lengua no sólo implica el desarrollo de la competencia lectora, sino que al mismo tiempo facilita en general la adquisición de la lengua, incluyendo el conocimiento del vocabulario, la morfología, las estructuras gramaticales, la semántica y la pragmática. Por la complejidad de la actividad lectora es importante que la lectura se lleve a cabo siempre silenciosamente para no sobrecargar la capacidad de comprensión del aprendiente, salvo que el objetivo de la lectura no sea la comprensión lectora sino la práctica y la corrección de la pronunciación en el aula. Llevar a cabo silenciosamente la actividad lectora le permite al lector concentrarse plenamente en su tarea de entender el contenido, extraer la información que busca y adaptar sus estrategias lectoras al texto y a sus propios objetivos. El lector puede detenerse donde lo crea oportuno, adivinar el significado de una palabra a partir del contexto, consultar el diccionario, leer el texto de forma rápida para saber cómo está organizado o para buscar una información concreta saltándose partes del texto o bien releyendo otras. De esta forma, el aprendiente puede leer de una manera conveniente según su objetivo de lectura.

Fuente:
https://cvc.cervantes.es/ensenanza/biblioteca_ele/diccio_ele/diccionario/lecturasilencio.htm

Son todas ideas secundarias del texto, EXCEPTO

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